Grupo ASE, empresa que se dedica a agregar demanda, es decir, a unir la demanda de grupos de clientes para comprar grandes paquetes de electricidad a un mejor precio, ha elaborado un informe -Impacto económico del nuevo sistema de tarifas en la industria manufacturera española- en el que analiza el impacto de la nueva tarifa eléctrica en la industria. Dos son las conclusiones principales del mismo: (1) el coste eléctrico aumenta un 16% de media; y (2) como la inercia de los procesos energéticos de la industria es superior a las dos horas, la existencia de tramos de una hora y de dos horas impide a estos consumidores maniobrar para acomodar su forma de consumo al calendario propuesto. "Si hacemos una lectura más positiva -matizan desde ASE-, esta también puede ser una oportunidad para que las empresas con una política energética activa puedan mejorar su competitividad, tal y como ya están haciendo muchos de nuestros clientes". La empresa asegura que sus clientes -mediante intervenciones de modificación de potencia- se ahorran un 17% de media.
El informe de ASE sobre el impacto del nuevo sistema de tarifas en la industria
La factura por el suministro completo de electricidad que abonan los consumidores se compone de una parte coyuntural (precio final de la electricidad) y de otra estructural (peajes y cargos). Lo que se ha modificado con fecha 1 de junio es la parte estructural, el acceso de terceros a la red, que es el que ordena la recaudación de la tarifa al objeto de pagar a los acreedores del Sistema Eléctrico Nacional (SEN). Desde el 1 de junio, la CNMC se encarga del diseño de los peajes, encargados de retribuir el transporte y la distribución de electricidad. Por su parte, el Ministerio asume el diseño de los cargos, que retribuyen al resto de acreedores del sistema (deuda titulizada, sobrecostes por extra-peninsularidad, antiguas primas al régimen especial, etc.). Pues bien, según ASE, el estudio del impacto del sistema de tarifas vigente desde el 1 de junio (peajes y cargos), realizado a partir de la comparación con el anterior (RD 1164/2001), revela que:
> El coste para la industria de la modificación regulatoria, por la potencia contratada y por la energía circulada, crece un promedio del 16%.
> El incremento del coste es mayor para la industria con tarifa de seis periodos en el escalón de tensión 2. Y menor para los suministros con tarifas de tres periodos horarios, en escalón de tensión 2, conectados a una tensión de 30 kV.
> Por sectores, el más castigado de forma directa por los incrementos de precio es el de automoción (+21,7%)
> El transporte ferroviario experimenta un incremento promedio del 17,1% en su aportación a la recaudación por potencia contratada y por energía circulada.
> El impacto del nuevo calendario eléctrico en la forma de consumir de la industria, esto es, la gestión de la demanda por efecto calendario que cabría esperar, es nulo. La variación porcentual de la curva de demanda está entre el 0 % y el 0,1%.
> La inercia de los procesos energéticos de la industria es superior a las dos horas, de manera que los tramos de una hora y de dos horas impiden a estos consumidores maniobrar para acomodar su forma de consumo al calendario propuesto.
> Existen tramos en las tarifas de seis periodos en los que la contratación óptima de la potencia contratada es cero o nula, con independencia del tipo de curva de carga de potencia que se optimice.
Informe Impacto económico del nuevo sistema de tarifas en la industria manufacturera española
